sábado, 25 de enero de 2020

El pin parental.

Cada día me sorprendo-y no sé exactamente porqué- con alguna nueva noticia de la prensa o la televisión. Ya debería de estar acostumbrado, pero no. Yo soy así. Mal pensado, y por eso creo que, cuando hay problemas reales hay que crear una burbuja, un velo que tape por momentos, o días (nunca se alargan meses), que distraiga la atención y la derive hacia otro lado, menos molesto, menos comprometido. No vaya a ser.....
El último, o debería decir el penúltimo, ha sido, es, el pin parental. Un subterfugio para que se llenen las emisiones de las distintas cadenas de televisión de opinadores, contertulios, charlatanes en definitiva a los que se les llena la boca con su verdad absoluta y permite, a su vez, que los políticos, los que de verdad pueden y deben hacer algo, divaguen, contemporicen, en lugar de tomar el toro por los cuernos y dejar claras las cosas. 
Los hijos no son propiedad de los padres, dicen unos -hasta el Papa lo hace- pero digo yo que algo tendrán que ver, ¿o no?. Y es por eso que, teniendo algo que ver, deben valorar que es y que no es el adoctrinamiento en las escuelas, porque, a mi entender, enseñar el proceso reproductivo, la aceptación de los que no son como nosotros, el respeto por y para con los demás, puede ser considerado como adoctrinamiento, pero del bueno Educación, al fin y al cabo.
Uno de los pìlares indispensables en el que se debe de sustentar la sociedad, el principal, es la educación, cosa que falta y mucho en la actualidad. Por eso debemos evolucionar y pedir una ley de enseñanza que no cambie con el color del gobierno de turno, que no adoctrine.
Dejemos a los maestros que hagan su trabajo.
-MiguelitoNews-

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