jueves, 14 de mayo de 2020

MI CUARENTENA (Cuaderno de bitácora). Día 60. Fallaron las Fallas.




¿Per fí parí la burra....!, ¡Habemus Papam...!. Dos meses, sesenta días justos han hecho falta para que los responsables de dar la noticia hayan podido finalmente desembuchar, que nos tenían de los nervios. Nada de desescaladas, ni declaración de renta, ni fin de la pandemia; no señor, la noticia más esperada era la de las Fallas, las cuales no se van a poder celebrar ni en Junio ni en Septiembre, sino que pasaran a la historia.

La desolación en los casales debe ser total porque todavía no habían querido comprender lo absurdo del empecinamiento de nuestro alcalde, a pesar de haberse suspendido otros eventos tan importantes como les Fogueres, la Magdalena, la Feria de Abril o los Sanfermines. ¿Qué querían: unas Fallas sin despertáes, sin mascletáes, sin ofrenda....?.

Eso era un atropello a la razón. Por supuesto que supone pérdidas para muchas personas, pero también las sufren otros sectores,  algunos de ellos vinculados a la fiesta y en general todos los demás, independientemente de su actividad. Ale Ribó, bonito, céntrate en la reforma de la Plaza del Ayuntamiento, que te está quedando cada día más mierdosa y vuélvenos locos a los valencianos con o sin ayuda de tu coleguita Grezzi, que se estruja el cerebro de chipirón que tiene en hacernos la ciudad cada día más inhabitable. Ya tendremos Fallas el año que viene, con permiso del bicho. Tú a lo tuyo, y no vayas mucho a trabajar porque te puedes cansar, además de que corres el riesgo de contagiarte.

Cambio de tercio. Por lo que se ve, con el caramelito que nos regalan los Picapiedra para que seamos un poco más felices, en lugar de estar supercontentos y cantando el "yo amo a Laura" resulta que nos encabronamos por menos de nada (algunos, que yo no he pasado de fase) y por cualquier cosa ya la tenemos liada. Proliferan las noticias acerca de enfrentamientos, peleas, acusaciones, reyertas  en las calles, generalmente en las cercanías de bares. Seguramente se deberá a los efluvios del alcohol, que algunos ya le habían perdido el gusto, porque no se entiende de otro modo.

Ya se pelean bastante en el Congreso las pocas veces que se juntan y se dicen hasta del mal que han de morir, pero se entiende porque son tan gilipollas que lo que más les gusta es el "y tú más", que da mucho juego. El Coletas aprovecha cualquier ocasión para atacar obscenamente, eso sí, con su voz aflautada de psicólogo venido a menos a todo aquel que se le ponga por delante con la soberbia que le caracteriza, pero queriendo parecer un corderito lechal.

Mientras tanto se les está empezando a revolucionar su gallinero particular en Andalucía, donde el Kichi y la Tere Rodríguez le salen de moza respondona tras no haberles gustado nada, al parecer, "El Pacto del Abrazo" y le avisan de su salida del grupo, además de que acogerán con brazos abiertos a los Anticapitalistas que, a su vez también reniegan de acudir a Vistalegre III, del que se sospecha sea un acto al estilo de Chávez donde Pablito Picapiedra quiere eternizarse en el poder.

Y emulando a sus mentores bolivarianos y ecuatorianos, ahora monta también un periódico digital en el que verter su mala baba, un tal "La última Hora" que deberás ser financiado por los propiosm ilitantes a razón, inicialmente, de cinco euritos al mes, y no es una sugerencia, es una orden de su amado líder. Y no todos están de acuerdo, también surgen voces discordantes. 

Pero claro, además de servir de tribuna desde donde insultar a tutiplén, mira por donde le ofrece un hueco donde colocar de directora a una tal Dina Bousselham, ex asesora del Coletas, que está muy pero que muy enfadada porque en el reparto de puestos no le ha tocado nada.

Y como resulta que, parece ser tiene a su ex-jefe cogido por las pelotas por un quítame allá ese móvil que le fué robado, que aparece, qué casualidad, en los papeles de Villarejo y posteriormente  llega también a manos de Pablito desde la revista Intervíu, que el Coletas también se calla como una putita, lo tuvo unos meses y se lo devolvió a Dina y tres años después -¡qué lástima!- la tarjeta SIM está dañada y la policía no puede sacar dato alguno que aadir a la causa.

¿No apesta....?

Por lo que toca a nuestra Comunidad, ayer me enteré de la bronca del señor Baldoví con la super-soberbia ministra Montero, con relación al reparto de millones que se les adeuda a todos los valencianos. No es que yo sea mucho de Compromís y toda esa pandilla de arribistas, y menos desde que son amiguitos del Coletas, pero reconozco que sin ser este el mejor momento para desviar la atención de lo que realmente es necesario, es decir, acabar con la pandemia, hace bien en jugar su baza, al igual que hacen a diario catalanes y vascos, que a ellos parece ser que todo se les permite, igual ahora con el PSOEDEMOS que antes con el PP que con el gobierno del color que sea.

¿Quieren vuestro voto......? Pues que lo paguen como acostumbran a hacer con los que no les da vergüenza pedirlo. ¿Les hace falta para seguir montados en el burrito....?. Muy fácil, que os "corrompan" igual que a los demás, que total, uno más no importa. Que no se piensen que lo único que sabe hacer el suecano es acudir al Congreso con naranjitas y la banda de música tocando Paquito el Chocolatero. Más vale vergüenza en la cara que dolor de corazón. Y el que no llora no mama.

 Que parecen tontos del culo.

P.D.- Hoy nuevo repunte: 217.

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